Igualdad de oportunidades para los estudiantes con Necesidades Educativas Específicas

Por: Lcda. Yeneri Carolina Rivas Msc.
22 de octubre de 2022

Imagen de brgfx en Freepik

“Uno recuerda con aprecio a sus maestros brillantes, pero con gratitud a aquellos que tocaron nuestros sentimientos”
Carl Gustav Jung

La educación del Siglo XXI hace frente a varios retos y uno de ellos es la igualdad de oportunidades para todos los estudiantes, por lo tanto, es necesario hacer cambios que permitan cubrir las necesidades de cada uno de ellos.

Los entornos tienen que cambiar para que se puedan incluir a las personas con Necesidades Educativas Específicas (NEE) que le permitan un desarrollo íntegro y que le promueva como ser humano diferente y único, valorar las diferencias y dar la importancia que corresponde a las necesidades de los estudiantes.

Durante tres (3) años se ha tenido la experiencia de conocer, explorar y contribuir para mejorar el ambiente del aula para los estudiantes con NEE, no solo con ellos sino para todos los estudiantes.

Ellos, en muchas ocasiones, apoyan, guían y acompañan a sus compañeros desde la tolerancia y el respeto a la diversidad, entendiendo que los estudiantes con NEE, requieren de una atención específica en su proceso de enseñanza-aprendizaje durante su escolarización o durante un periodo específico.

Para responder a las Necesidades Educativas de los estudiantes es importante identificarlas, conocerlas y abordarlas, realizando cambios significativos, reales, pertinentes y acordes a una educación del siglo XXI.

Con relación a estos cambios, deben darse en contenidos curriculares, instalaciones, materiales de aprendizaje y sobre todo en la preparación de los docentes debido a que se deben realizar adaptaciones específicas.

La educación inclusiva debe caracterizarse por un ambiente profesional sensible a las demandas y necesidades específicas de los estudiantes, que le permita el “aprendizaje significativo de los contenidos curriculares, pero no solo eso, sino que le dé paso a desarrollar sus habilidades sociales y emocionales como seres humanos, capaces de sentir y mostrar sus sentimientos” (González & Triana, 2018).

La experiencia durante este tiempo de acompañamiento a estudiantes con NEE ha hecho comprender que la responsabilidad no recae en el maestro de apoyo pedagógico o en especialistas, ya que los docentes no pueden seguir aferrados a un rol tradicional “trasmisor de información”.

Los docentes continuamente deben prepararse y tomar acción para desarrollar, además de conocimientos, capacidades, habilidades que le permitan desarrollarse y comunicarse de la mejor manera en medio del entorno que le rodea, esto hará que sean recordados con gratitud porque se ha tocado sus sentimientos y reforzado sus habilidades.

EDgame
Otros artículos en el blog